Por Andrea Guachalla
Honrar a Dios como cristianos se extiende a todas las áreas de nuestras vidas. Una verdadera vida de adoración significa que buscaremos el consejo y la sabiduría de Dios para todo lo que hagamos, buscaremos la Palabra de Dios, nos acercaremos a Él en oración y buscaremos el consejo piadoso de nuestros hermanos en Cristo para cumplir con nuestras responsabilidades como siervos de Dios, como miembros de familia, miembros de la iglesia y como ciudadanos. Esto último implica tomar una decisión acertada a la hora de votar por un candidato presidencial.
El día en que elegiremos un nuevo presidente para Bolivia se acerca cada vez más, y no solo para nosotros sino también para millones de personas repartidas en 12 países diferentes donde se llevarán a cabo elecciones presidenciales entre septiembre y diciembre de 2020, el año más impredecible que nos haya tocado vivir este siglo. Con todas las incertidumbres que rodean la crisis médica y económica general en todo el mundo, también estamos sometidos a un grado de incertidumbre con respecto a los asuntos políticos.
Aunque en algunos países la gente va a tener que elegir entre 2 o 3 partidos políticos y candidatos presidenciales, algunos otros países tienen que elegir entre más de 5 – como en el caso de Bolivia, donde 8 partidos políticos se postularán para el cargo – lo que hace que la gente reflexione y dude. Dubitamos no solo porque tendemos a centrarnos en los defectos de cada candidato, sino también porque han pasado décadas desde que el sentimiento general es que estamos votando por el menor de los males. En incertidumbre o no, tenemos que tomar una decisión.
Pronto.
O al menos antes del 18 de octubre, cuando está previsto que tomen lugar las elecciones.
Mientras tanto, nos quedamos preguntándonos: ¿quién sería la mejor opción para presidente? ¿Quién estaría más dispuesto a responder a la convulsión social y la crisis médica del país? Más importante aún, como cristianos, nos preguntamos: ¿Qué partido político/presidente se alinearía más con la fe cristiana aunque sabemos que la mayoría de los candidatos no son cristianos profesos?
La verdad es que, incluso con todos los análisis que podemos hacer, no podemos estar seguros de lo que depara el futuro si elegimos a un candidato u otro, solo Dios lo sabe. Pero hay cosas que podemos hacer como ciudadanos cristianos viviendo en este mundo finito: sopesar a cada candidato/partido político con la Palabra de Dios y tomar la decisión más sabia posible sabiendo que nuestro verdadero Rey celestial nos ha colocado en este país no para ser indiferentes a lo que ocurre en él, sino más bien para amar y servir.
Parte de amar a nuestro prójimo y servir a nuestro país es tomar la decisión más sabia, objetiva y solidaria posible ante los ojos de Dios, no del hombre. Esto implica que debemos tomarnos el tiempo para informarnos sobre cada candidato, partido político y sus propuestas y ver si se alinean con la Palabra de Dios, aun cuando reconocemos que muchos de ellos no profesan el cristianismo.
En la Palabra de Dios, vemos pautas y patrones de cuál es el papel y la responsabilidad de los gobiernos y líderes en la sociedad, y lo que deben defender. También leemos en Proverbios cuál debe ser el carácter de un líder (rey). Aunque el verdadero carácter de un candidato presidencial es difícil de conocer porque lo vemos principalmente en la televisión o en la prensa general y la personalidad que muestran no necesariamente refleja su yo genuino, es valioso conocer e intentar identificar estos rasgos en los candidatos a la presidencia y la voluntad de su partido político de alinearse lo que la Biblia dice que es correcto.
Únase a mí mientras revisamos 7 puntos clave que debemos considerar al decidir quién obtendrá nuestro voto en las próximas elecciones:
1. Un candidato debe ser competente en política: Según Proverbios 24: 5, donde Salomón da instrucciones al futuro rey: un sabio es fuerte, y un hombre de conocimiento aumenta su poder. En este sentido, alguien que aspira al liderazgo de un país debe estar preparado académicamente para el trabajo. Su talento, disposición, conocimiento y experiencia previa es lo que asegura que esté al menos capacitado para gobernar un país conociendo su contexto y las mejores formas de responder a las diferentes necesidades de la población.
Reflexionemos en Proverbios 10:14 “El sabio atesora conocimiento, pero la boca del necio invita a la ruina”. Alguien que está bien preparado, y sigue creciendo en conocimiento e instrucción, probablemente tomará decisiones sabias y responderá lo mejor que pueda a los problemas y necesidades de un país, a diferencia de una persona no preparada cuya falta de conocimiento podría conducir a un país a las ruinas.
2. La humildad será una marca de su carácter: aunque subjetiva, la humildad sigue siendo uno de los rasgos de carácter más importantes en un líder y debe ser considerado. Un carácter humilde tendrá muchas implicaciones en la forma en que se comporta un aspirante a líder. Significa que estará dispuesto a identificarse empáticamente con la gente y ser consciente de la escasez, los problemas y las circunstancias que enfrentan. Significa que buscará voluntariamente interactuar con personas que son “inferiores” a él (Lucas 22: 25-27), con una actitud afectuosa, buscando estar al servicio de ellos y familiarizarse con sus necesidades (Juan 13: 5). -17).
3. Un partido/líder político buscará justicia: su sentido de la justicia debe ser tan fuerte que pueda identificar de manera precisa y sabia los grupos que están en mayor peligro de ser perjudicados (los pobres, los necesitados, los niños, los bebés por nacer, etc.) , y tomaría medidas para protegerlos y hacer justicia cuando hayan sido agraviados (1 Pedro 2: 13-14). Tener un líder/gobierno que haga justicia y castigue a los malhechores como dice Proverbios 19: 9 y 20:26, y no muestre parcialidad hacia los malvados (Proverbios 18: 5) asegurará que los malvados y los malhechores teman. por sus vidas cuando cometen delitos porque saben que las autoridades harán justicia y que no saldrán ilesos de su maldad (Proverbios 21:15). Buscar justicia también significa que un líder y sus políticas no responderán apresuradamente a los conflictos, sino que se tomarán el tiempo para escuchar con atención a todas las partes implicadas y responder de manera imparcial (Proverbios 18:13, 17).
Implicado en esta búsqueda de justicia, un buen gobierno / líder nunca oprimirá a aquellos que son más débiles y no tienen medios para protegerse a sí mismos. Un líder nunca afligirá injustamente a los pobres, los necesitados, los que no pueden defender sus derechos como en el caso de los niños, los bebés por nacer, las personas discapacitadas y minorías (Proverbios 22: 22-23).
4. Un líder/partido ve a todos como iguales: esto también es parte de ser humilde y buscar justicia. Un líder tiene los ojos puestos en la humanidad de las personas y ve a todos ellos igualmente merecedores de honor, protección, oportunidades y ayuda. Un aspirante a líder debe valorar a todos sin importar su lugar de nacimiento, nivel de educación, estatus social, estatus económico, privilegio por nacimiento, etc. (Juan 7:24). Aunque el mundo y la gente puedan ver a los demás de acuerdo con todas las cosas mencionadas porque el pensamiento humano es pecaminoso y el hombre tiende a desear gobernar a los demás, un aspirante a líder debe ser imparcial, y ver a cada grupo de personas como igualmente valioso (1 Pedro 2:17, 1 Timoteo 5:21).
5. Un líder/partido político protege los derechos que Dios nos da a vivir, trabajar y hablar la verdad: un gobierno buscará con valentía y firmeza dar a todos el derecho a vivir y no ignorará a las personas que son asesinadas injustamente (Proverbios 24 : 11-12). Por eso es tan importante tener en cuenta que para que consideremos votar por un partido en particular, debemos estar seguros de que defienden la vida de los bebés aún no nacidos, un gobierno que apoya la vida en lugar del asesinato de bebés (aborto) es la señal más clara de que realmente respetan la vida de todos.
Dios también nos ha dado el derecho y capacidad de trabajar con nuestras manos y ganar un salario por ello (Levítico 19:13, Romanos 13: 7, Colosenses 3:23, Proverbios 12:11), razón por la cual un gobierno debe permitir que la gente ganar un salario digno por su trabajo y proteger su propiedad privada como algo que se ganó justamente. Aunque tenemos ejemplos en la Biblia de cristianos compartiendo todo, e incluso vendiendo sus propiedades para satisfacer las necesidades de todos, está claro que lo hicieron voluntariamente por amor y compasión, nunca por coerción (1 Corintios 9, 1 Pedro 5). Finalmente, es un mandato de Dios para nosotros los cristianos hablar la verdad en amor (Efesios 4:15) porque es Su verdad la que nos hace libres (Juan 8: 31-32), por lo que un gobierno que nos permite profesar nuestra fe, abrazar el diseño de Dios para el matrimonio (entre un hombre y una mujer), la familia, la sexualidad, y la iglesia está alineada con la Palabra de Dios en ese sentido.
6. Un líder se asociará con las personas adecuadas: Un factor clave para el éxito de un gobernante es el consejo y la guía de sus compañeros. Esto significa que si un líder tiene hombres injustos, codiciosos y carentes de conocimiento en su círculo íntimo, sus caminos e ideas contaminarán su pensamiento (1 Corintios 15:33), y existe una gran posibilidad de que el líder esté haciendo mal en lugar de hacerlo. bueno. Hay una razón por la que Proverbios 22:24 dice que no es prudente asociarse con malhechores. Por ejemplo, un líder que se asocia con políticos, organizaciones, activistas que se oponen al diseño que Dios dio al matrimonio y la sexualidad podría resultar en que él adopte estas políticas y las fuerce a incorporarse a la población.
En oposicióm a estar mal acompañado, un aspirante a líder debe estar rodeado de personas que estén bien preparadas para el trabajo y que le ofrezcan una buena orientación, consejo y responsabilidad. Tener personas conocedoras alrededor creará un buen ambiente para una buena decisión y un proceso de toma de decisiones inteligente. Asociarse con organizaciones, entidades, etc. que tienen valores que honran a Dios con respecto a la vida, la justicia, la libertad de expresión, etc., expone sus propios puntos de vista sobre la moralidad.
7. Por último, un líder potencial debe ser amable al hablar: La Biblia dice que no solo un “rey” se deleitará en labios veraces (Proverbios 16:13), sino también que hablará con gracia y guardará silencio cuando sea el momento adecuado. (Proverbios 21:23). El hecho de que un aspirante a líder pueda decir lo que sea pertinente y necesario, y elegir sus palabras, indica que es alguien que tiene cierto grado de autocontrol.
Lo opuesto: el discurso necio, trae destrucción (Proverbios 10:19, Proverbios 18:21). Sabemos que las palabras necias a menudo desacreditan a las personas y dan la impresión de falta de preparación y necedad. Y no solo eso, sino que el discurso imprudente también revela problemas subyacentes que pueden hacer que la gente se sienta ansiosa y dude de la preparación de los líderes.
Sabemos que no hay líderes / gobiernos perfectos y que rara vez encontraremos alguno que cumpla con todos estos criterios a nuestros ojos, y menos aún a los ojos de Dios. Pero podemos orar para que Dios tenga misericordia de nosotros y nos dé el mejor gobierno gobernante posible para que Él pueda ser honrado. En algunos casos eso significa que tendremos que votar por el menor de los males, pero incluso en esas circunstancias podemos confiar en que, en última instancia, es el Señor quien pone a los gobiernos en su lugar como Sus siervos y para que ellos pongan orden y justicia (Juan 19 : 10-11).
Podemos sentirnos consolados al saber que un gobierno, un presidente o un líder no es nuestro salvador, Cristo lo es, y como cristianos, sabemos que nuestro mayor problema no es un gobierno “malo”, sino el pecado. Y el único que gobierna sobre el pecado es nuestro Padre misericordioso. Nuestra confianza no necesita depender del hombre sino de Dios.
Tomemos un tiempo para reflexionar y analizar objetivamente y a la luz de la Palabra de Dios, qué partidos políticos están más en línea con la Palabra de Dios y qué candidatos presidenciales tienen algunos de los rasgos esenciales de carácter que debe tener un líder. Esto y acudir a Dios en busca de sabiduría y consejo nos llevará a honrar a Dios con nuestro voto.
Finalmente, les insto a que no esperen ahora a que estos candidatos les sirvan a ustedes. sino que elijan servirlos en este momento crítico orando por ellos: oren por sabiduría, transparencia, perseverancia y honestidad, pero lo más importante oren para que estos candidatos vean el liderazgo no como un privilegio, sino como un sacrificio.
En todo esto Dios es y será honrado.
Otras referencias:
- Pascal Groby. 2018. What the Bible really says about government. The Week.
- Stan Patterson. 2010. A Synthesis of Leadership Principles Emerging from the New Testament.
- David Mathis. 2016. True Leadership Is Sacrifice, Not Privilege. Desiring God.
Excelente articulo, en esta tiempo de necesidad de verdaderos lideres, a tomar muy en cuenta; aunque los lideres del país no cumplen esos 7 puntos que se menciona en el articulo toca votar por el menos malo y el que se acerca es el Dr. Chi. No obstante, el dijo “que huele mal Oruro” jejejejejeje y yo digo que huele mal todo Bolivia. porque lamentablemente es una realidad. bueno a votar por el menos malo.
Me alegra mucho que lo hayas leído, hermano. ¡Un saludo grande!